A 40 años de la recuperación democrática, recordamos aquel hecho tan caro a nuestra historia, porque el pueblo argentino pudo salir de la noche negra del terrorismo de estado, y empezar a dejar atrás el plan económico de la dictadura, que destruyó la producción, el trabajo y los derechos laborales y sociales, que tantos años había costado establecer y defender.
No han sido tiempos sencillos, hubo avances y retrocesos, e indudablemente hoy hay grandes dificultades, pero todo puede resolverse y discutirse en el marco de un sistema democrático, y de respeto institucional. Eso nos enseñan todos los días las madres de plaza de mayo, las abuelas, los hijos y todos los organismos y militantes de derechos humanos, y las organizaciones gremiales y sociales que día a día pelean los derechos de los sectores sociales que representan, y siempre desde el marco del contrato social de la democracia, el NUNCA MAS, que signó estas cuatro décadas.
Somos conscientes de los problemas económicos que ha atravesado y atraviesan los argentinos y argentinas, por eso mismo, nuestro trabajo por una Justicia Legítima, y un Sistema de Administración de Justicia , que como tal, de respuestas eficaces al pueblo que acude a para poder ejercer efectivamente sus derechos, es un profundo compromiso con la superación de los mismos, y en pos de una sociedad igualitaria, junto con tantos sectores sociales que bregan día a día por ello, en distintos escenarios.
Por nuestra trayectoria y la que queremos seguir construyendo, no podemos permanecer indiferentes ante discursos y proyectos políticos, que proclaman destruir el patrimonio cultural de derechos que con orgullo ostenta la historia de nuestro país.
La salud Pública , la Educación Pública en todos sus niveles, los derechos de las mujeres y las diversidades , los derechos de los niños, niñas y adolescentes, la protección del ambiente como casa común , el reconocimiento de los derechos de los pueblos originarios, de los adultos mayores, de las personas migrantes, de las personas privadas de libertad, de las personas con discapacidad, y todas las personas que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad, la soberanía argentina, en todo su alcance , la moneda argentina como parte de ella, la coparticipación a las Provincias , esencia del sistema federal , son derechos reconocidos constitucionalmente, pero además forman de un patrimonio histórico que constituye a la República Argentina, desde la lucha por su independencia, y se ratifica a partir de las luchas por la cuestión social y los derechos laborales , en el siglo XX y XXI
Realmente, escuchar hablar de la venta de niños, o de la venta de órganos, la privatización de las ballenas, la privatización del mar, o la suspensión de las relaciones con el Vaticano, son temas que no resisten normativa constitucional, ni convencional, ni de ningún tipo.
La justificación del terrorismo de estado, no sólo desconoce el PACTO DEMOCRÁTICO, y 40 años de la trascendente gesta por la Memoria , Verdad y justicia, que tiene un recorrido de militancia , sino también de políticas de estado en derechos humanos , desde la Conadep, el Juicio a las Juntas, los Juicios de la Verdad, las nulidades de las leyes de impunidad, los Juicios de lesa humanidad , la recuperación de los nietos que nos sigue conmoviendo, y también la recuperación de los restos y las historias de aquellos que forman parte de los 30.000 detenidos desaparecidos.
Y como si fuera poco, en estos días reapareció una activista defensora del terrorismo de estado, que pide la libertad de los condenados por delitos de lesa humanidad, porque será necesario volver a reprimir las luchas sociales.
Consideramos, que la Democracia es un sistema político que permite debatir diferentes proyectos políticos, y económicos, y de gobierno, con respeto de las mayorías y las minorías, pero el mismo sistema ha constituido el límite del ESTADO CONSTITUCIONAL DE DERECHO que implica el respeto de los derechos humanos , y el no retroceso en ese plano.
Pensamos que si valoramos la democracia que hemos sabido construir, con el sacrificio de aquellos que dieron su vida por un país
Pensamos que si valoramos la democracia que hemos sabido construir, con el sacrificio de aquellos que dieron su vida por un país independiente y por los que lucharon y lo siguen haciendo por una vida digna para todos y todas, no podemos aceptar , ni naturalizar expresiones políticas, que no respetan límites éticos, ni políticos, ni jurídicos.
SON 30.000
Justicia Legitima